Me pregunto
si habrá hecho alguien
en alguna ocasión
lo que no hizo nunca
con entusiasmo.
Estaré solo,
entre todos,
mientras no sienta, al tocarme,
su cuerpo
sin que me toquen.
No habré dicho nada
hasta que haya dicho todo lo que debía
cuando estuve callado y llorabas.
Recuerdo haber llorado luego,
cuando ya no había remedio.
Quizá el infierno sea
cuando todo ya sea irremediable, todo
pasado, sin memoria,
el inexorable recuerdo
de nuestros fracasos.
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