viernes, 5 de septiembre de 2008

-¿Está usted citado?
-Pues no. Pasaba por aquí y me dije: podría resolver el trámite, por eso entré.
-Pues si usted no está citado, lo siento, pero no puedo atenderle. Lo que puedo es citarlo, por ejemplo, para mañana.
-¿Y no puede atenderme ahora?
-No, porque no está usted citado.
-Pero si usted no está haciendo nada ahora mismo.
-Ya, lo que ocurre es que tengo un protocolo de conducta, según el cual, para atenderle, debe usted estar citado.
-Pero hombre …
-Nada de peros. El protocolo es ley y la ley debe respetarse en todo caso.
-Pero …
-¿Quiere usted o no quiere que le cite para mañana?

(No es ciencia ficción; no es imaginación; es un relato de hechos, transcrito casi al pie de la letra, sin que en lo posible e involuntariamente omitido haya nada que altere o modifique la realidad)

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